Arreglos esperados como pocos. Pero la estación no será lo único que se abordará: también las calles aledañas, tecnología, colectivos las 24 horas y varias modificaciones de importancia. También se mejorará Tapia de Cruz, con articulado inclusive.

En el palacio municipal, el intendente Ariel Sujarchuk brindó una conferencia de prensa para anunciar que el próximo miércoles 8 de agosto comenzarán las obras de puesta en valor integral de la Estación Terminal de Belén de Escobar de transporte público de pasajeros y del Centro Comercial de la calle Rivadavia, punto central del distrito por el que transitan a diario aproximadamente 30.000 vecinos.

“En el contexto de un país que paralizó gran parte de la obra pública, nosotros tomamos la decisión política de continuar con todos los proyectos que teníamos previstos, porque queremos sostener el trabajo de la gente, la actividad comercial y seguir generando oportunidades concretas para el desarrollo y el crecimiento de nuestro distrito”, expresó Sujarchuk, quien brindó los detalles de cada proyecto acompañado por los secretarios de todas las áreas involucradas: Javier Rehl (Gobierno), Diego Benítez (Planificación e Infraestructura), Gastón D´Aquino (Planificación y Espacio Público) y el titular de la Agencia Municipal de Transporte, Luis Carranza.

Render que muestra cómo quedaría la estación.

La obra de la Estación Terminal tiene como principal objetivo modernizar y optimizar el espacio con nuevas paradas bajo techo, y con la construcción de veredas y dársenas de taxis y colectivos completamente renovadas, provistas de luminarias con tecnología LED para mayor seguridad de los pasajeros. Por su parte, los usuarios dispondrán de líneas comunales las 24 horas, y podrán consultar en tiempo real la frecuencia de las unidades que se transmitirán a través de distintas pantallas. Esta obra se realiza en sintonía con el llamado a licitación para modernizar el sistema de transporte público de pasajeros.

También se repavimentará la avenida Tapia de Cruz, desde las vías del ferrocarril hasta Mitre, utilizando pavimento articulado de colores, lo que permitirá igualar su nivelación con las veredas, eliminando cordones y cunetas, con un nuevo sistema de desagüe y agregando rejas de ambos márgenes de la vía pública para conformar así un diseño similar al de la calle Hipólito Yrigoyen, simulando un paseo y con la posibilidad de convertirse en peatonal.

Rivadavia, como Dios manda..

Asimismo, el intendente presentó la renovación del paseo comercial de la calle Rivadavia, que beneficiará a los comerciantes del distrito con reformas que permitirán captar un mayor flujo de consumidores y generar nuevas fuentes de empleo, entre otras mejoras.

A lo largo de 400 metros, entre avenida 25 de Mayo hasta avenida Tapia de Cruz, se renovará de manera profunda y definitiva la calzada con un pavimento nuevo, retirando las viejas placas y reemplazándolas por otras de mayor resistencia al intenso tránsito vehicular y de colectivos, que soportará hasta 25 mil kilos.

La obra incluirá la restauración de las veredas de Rivadavia, entre 25 de Mayo y Tapia de Cruz; y de las calles y veredas de Spadaccini, desde Rivadavia a Sarmiento; Travi desde Sarmiento hasta las vías del ferrocarril; y Tapia de Cruz desde Sarmiento hasta las vías del ferrocarril.

Allí se instalarán nuevas luces LED, y se colocará nuevo mobiliario urbano. Junto con esto, también se implementará un carril exclusivo para los colectivos, con el fin de reordenar el tráfico y agilizar la circulación.

“Con esta obra le estamos cambiando la cara a Belén, así como lo hicimos o hacemos en otros cascos céntricos del municipio. Son trabajos que mejoran el tránsito, pero que también recuperan el espacio público para ganar en vida urbana y social para que nuestras calles sean un espacio de encuentro de miles de vecinos”, finalizó el intendente.