20.000 millones de dólares: No es un salvataje, es una hipoteca a la soberanía

Desde el gobierno de Milei y su equipo económico se presenta el acuerdo swap con el Tesoro norteamericano como un gran logro y una muestra de confianza internacional. Sin embargo, detrás de la fría cifra de los 20.000 millones de dólares, se esconde una letra chica que debería encender todas las alarmas en el pueblo argentino. Por Javier Rehl (*).
No es un salvataje; es un nuevo estatuto legal del coloniaje, como dijo Raúl Scalabrini Ortíz sobre el Pacto Roca-Runciman a principios del Siglo XX, un manual de la dependencia, una vieja receta que siempre termina pagando el mismo sector: los trabajadores y la Nación en su conjunto.
El peronismo, forjado en la lucha por la independencia económica y la soberanía política, no puede observar con indiferencia cómo se negocian, a espaldas del pueblo, las condiciones reales de este préstamo. Según fuentes y análisis de lo exigido por el Secretario del Tesoro, Scott Bessent, “aprovechamos comprar barato para vender caro” y esa “confianza” se compra al precio de:
✅ La Entrega Territorial: Se deberá concretar la posibilidad de ceder espacio para una base militar extranjera en Tierra del Fuego. ¿Es este el precio de la “alineación occidental”? La historia nos enseñó, con dolor, que la presencia de bases militares foráneas es la antítesis de la autodeterminación de los pueblos. La Defensa Nacional se construye con banderas argentinas, no con tropas ajenas en nuestro suelo sagrado.
✅ El Alineamiento Absurdo: Una de las condiciones sería romper relaciones económicas y comerciales con China. En un mundo multipolar, esta no es una estrategia, es un suicidio. China es uno de nuestros principales socios comerciales, comprador de soja, carne y un inversor clave en infraestructura. Cambiar un socio real y diverso por la subordinación a un solo patrón es un acto de irresponsabilidad que condena nuestra economía a la volatilidad y al capricho ajeno.
✅ El Ataque a los Trabajadores: Como moneda de cambio, se exige la reforma laboral y previsional. Traducción: flexibilización, pérdida de derechos conquistados, jubilaciones miserables y precarización laboral. Es el mismo ajuste que siempre paga el pueblo. El peronismo sabe que la justicia social no es un gasto, es la base de una sociedad equilibrada, y estos planes buscan dinamitarla.
✅ El Saqueo de los Bienes Comunes: El acuerdo garantizaría privilegios para empresas norteamericanas en licitaciones estratégicas y una política extractivista favorable para el litio y las tierras raras. Es decir, se entregan nuestros recursos naturales no renovables, las llaves de la economía del futuro, a cambio de unos dólares. No se negocia valor agregado, industrialización ni transferencia tecnológica. Se repite el ciclo de la Argentina granja y mina, condenándonos a un rol subalterno en la cadena global de valor.
Estas condiciones no son “medidas económicas”; son cláusulas de un nuevo Estatuto Legal del Gobierno Colonial. El gobierno actual, en su desesperación por el reconocimiento externo, llegar con alguna chance a las elecciones nacionales del 26 de octubre, parece dispuesto a canjear por divisas lo que no le pertenece: la soberanía, el proyecto de país y el futuro de las próximas generaciones.
Desde el Movimiento Peronista, sostenemos que la Patria se desarrolla con producción, trabajo y Comunidad Organizada, no con préstamos que atan de pies y manos. Los 20.000 millones de dólares no serán más que un espejismo si el costo es la entrega de nuestra capacidad de decidir.
La Patria no se negocia. No a la entrega disfrazada de ayuda. Sí a una Argentina libre, justa y soberana.
(*) Presidente del bloque de concejales de Unión por la Patria de Escobar / Subsecretario Electoral y Parlamentario de la Provincia de Buenos Aires.