60: otra vez, cuarto intermedio
El ministro de Trabajo, Carlos Tomada, y los delegados sindicales de la Línea 60 mantuvieron una nueva reunión en la sede de la cartera laboral, en búsqueda de un acuerdo que permita destrabar el conflicto que desde hace 37 días afecta el servicio de colectivos.
Los conductores pretendían salir a prestar servicio ayer tras el levantamiento de la restricción judicial impuesta por la empresa Monsa pero las discrepancias en torno a cobrar boletos se los impidió, por lo que ayer volvieron a cortar la autopista, aunque esta vez no hubo incidentes a raíz de que sólo interrumpieron dos carriles.
Mientras se desarrollaba esta manifestación, Tomada y su par de la provincia de Buenos Aires, Oscar Cuartango convocaron tanto al sindicato de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) como a los delegados de la línea que protagonizaron la protesta.
Estos últimos aseguraron que la empresa Monsa envió 53 telegramas de despidos y exigen su reincorporación, pero la UTA detalló que ya habían sido incorporados 47 de ellos, mientras Monsa afirmó que hay seis casos judicializados, algo que es rechazado por los delegados.
Tras la reunión, los delgados valoraron lo positivo de la reunión y las negociaciones continuaron esta mañana. “La Comisión Interna se llevó una propuesta que va a analizar», trascendió tras culminar. Desde la sede ministerial estiman que en las próximas horas habrá un nuevo encuentro.
En tanto, un numeroso grupo de choferes se encontraba en estado de asamblea permanente, concentrado en la cabecera de la empresa Monsa, en Ingeniero Maschwitz.