Millonario fallo judicial en favor de un vecino de Garín
La Justicia Civil de CABA condenó a la empresa Nación Seguros S.A a abonarle a una vecina de la localidad de Garín una indemnización millonaria por los daños y perjuicios que en ocasión de un accidente de tránsito padeció en Martínez en 2012.
La cuantiosa sentencia se acercaría a una suma superior a los dos millones y medio de pesos entre todos los conceptos y gastos reclamados.
Ese dinero debería salir del patrimonio del asegurador o en su defecto del bolsillo del asegurado.
La jugosa indemnización fue obtenida gracias al patrocinio letrado del Dr. Pablo Cos, titular del estudio jurídico homónimo “Cos & Asoc.”, quien más allá de ser un vecino de Garín, se especializa en reclamos por accidentes de tránsito, trabajo y todas aquellas cuestiones que tengan que ver con los contratos de seguros.
Lo novedoso del fallo dictado por el Juzgado Nacional Civil Nº18 y confirmado por la Sala C de la Cámara de Apelaciones del fuero, bajo autos D.S c./Pintaudi P. José s./Ds. Ps. Expdte.24239, no solo fue el monto concedido en concepto de indemnización sino que se destaca por haber dejado sin efecto la prioridad de paso regulada en el Art.41 de la ley Nacional de Transito –que obliga a ceder el paso a quien circula por la derecha-, así y todo, circulando la vecina por la izquierda la justicia accedió a su reclamo.
Se expidió diciendo que “es cierto que cuando se produjo el impacto, el automóvil del demandado circulaba por la derecha del de la actora, por lo que, en principio, aquél tendría prioridad de paso. Pero esta prioridad no es absoluta, pues ella se aplica cuando ambos rodados arriban a la intersección simultáneamente. Y de la localización de los daños en el Peugeot 206, resulta que este estaba mucho más adelantado en el cruce que el 504. Por tanto, el conductor de este último vehículo debió ceder el paso. Y no lo hizo. Por tanto es culpable”, sentenció sin hesitación el Magistrado Dr. Guillermo Blanch.
La síntesis de la noticia se puede fijar a la inversa del principio diciendo que “a veces es mejor un buen juicio a un mal acuerdo” y que para este vecino, el buen abogado ha sido quien encontró la excepción a la norma.