“El populismo nos trajo hasta acá, ya se demostró que no saben”
Con los indicadores de pobreza e indigencia en los valores más altos, una inflación desbordante, un clima de inseguridad reinante como pocas veces hemos visto, ha quedado demostrado que las versiones del populismo no traen soluciones, solo amplifican los problemas. Por Mariano Castagnaro (*).
Vemos un partido político gobernante que toma al Estado como de su propiedad (cuando es de todos los argentinos) y realiza acciones inconducentes a un buen desarrollo de la sociedad. Las sociedades modernas que más crecen son aquellas donde se le da prioridad a la educación, estamos en la era del conocimiento. La riqueza de las naciones está dada por lo que sucede en el cerebro de sus habitantes más que por las riquezas naturales, sin ir más lejos, Suiza o Taiwán, que apostaron fuerte a la educación, son mucho más ricos que Venezuela que tiene la reserva petrolífera más grande del mundo.
La educación en Argentina, después de décadas de populismo, está en manos de los gremios docentes, con pruebas internacionales por el piso, con paros, con mal mantenimiento edilicio, con retraso curricular en cuanto a lo que se trata en las sociedades modernas. Hoy vemos empresas basadas en el conocimiento que valen más que el PBI Argentino. Sin ir más lejos, la Taiwan Semiconductors Company (TSMC) vale 800 billones, más de dos veces el PBI argentino. Taiwán, que en los ´70 era famoso por vender peluches, juguetes y paraguas, capacitó a su población, invirtió en educación y su PBI per capita está al nivel de los países desarrollados. Igual Singapur. Lo mismo Israel.
Argentina tiene una chance, pero no es a través del facilismo, del gremialismo permisivo y decadente, sino elevando los niveles de excelencia y exigencia del sistema educativo. Fundamental fortalecer la educación publica que es el verdadero igualador de oportunidades, así fue como nuestro país, con la Ley 1420 de educación laica, gratuita y libre, hecha en la presidencia de Roca y con las ideas de Sarmiento, fue un avanzado en América Latina convirtiéndose en corto tiempo en uno de los países más ricos de la tierra.
Frente a la disyuntiva del ballotage entre dos fuerzas que no he votado, prefiero el cambio. La realidad actual generada por muchísimos años de kirchnerismo necesita un cambio de raíz. Massa es el ministro de Economía de Alberto, es con quien más ha subido la inflación, fue parte central de este gobierno desde la Presidencia de la Cámara de Diputados y todas sus medidas desde que está al frente de la cartera han derivado en un salto del dólar de $270 a $1000, una inflación que cuando se fue Guzmán estaba en el 3% mensual y ahora en el 12%, ha habido un desmanejo total de la situación. Como dirían nuestros abuelos: mucho ruido y pocas nueces. Es hora de un cambio.
Mariano Castagnaro
JxC Escobar