A días del cierre de listas en las boletas municipales y seccionales, RU intenta hacerse fuerte con nombres propios. María Inés Chiorazzo es vicepresidente a nivel provincial y Javier Waisman asesor en la Cámara de Diputados.

Con el calendario electoral avanzando y el cierre de listas a la vuelta de la esquina, el espacio de Republicanos Unidos (RU) busca consolidar su presencia tanto a nivel local como provincial. En el distrito de Escobar, dos referentes ya ocupan lugares estratégicos dentro de la estructura del partido, lo que posiciona a este espacio como una fuerza con peso propio dentro del armado liberal.

Por un lado, María Inés Chiorazzo, vecina y empresaria de Escobar, se desempeña actualmente como vicepresidenta del partido a nivel provincial. Su rol la ubica en el corazón de las definiciones políticas, especialmente en momentos clave como la negociación de candidaturas y alianzas. Por otra parte, el arquitecto Javier Waisman, también escobarense, aporta su experiencia como asesor del legislador Sebastián Pascual en la Cámara de Diputados de la Provincia, lo que suma un respaldo técnico y político al armado local.

Chiorazzo junto al diputado Pascual.

En medio de un panorama incierto para muchos partidos, RU intenta diferenciarse con un discurso claro y alineado a los valores del liberalismo clásico, mientras busca sumar representación territorial. Si bien aún no se han oficializado las listas definitivas, se espera que Escobar figure entre los distritos donde el partido presente candidatos propios o acuerdos con otras fuerzas afines.

Waisman y Chiorazzo vienen organizando varias reuniones con dirigentes opositores de Escobar.

“El objetivo es construir desde abajo, con referentes genuinos de cada comunidad”, afirman desde el partido. En ese camino, los nombres de Chiorazzo y Waisman suenan cada vez con más fuerza como actores clave en el esquema seccional.

Waisman es asesor de la Cámara de Diputados de la Provincia.

El cierre de listas será un test de madurez para Republicanos Unidos, que deberá demostrar si la estructura que viene tejiendo a nivel provincial logra traducirse en una oferta electoral competitiva en cada rincón del conurbano.