Siguen las protestas contra el Pigeon Club
Desde la entidad «Salvemos animales» recalcaron que la entidad «no puede ser un coto de caza porque no tiene autorización del FAUNA» y además porque se encuentra en zona urbana. El juez de faltas confirmó a este medio que no tienen competencia para actuar.
Llega otra competencia en el Pigeon Club de Ingeniero Maschwitz y las críticas no se hicieron esperar. «La nueva masacre», tal como la define la institución «Salvemos animales», se hará el 31 de octubre y el 1° de noviembre.
«No está habilitado por el RENAR como operador cinegético, está simplemente habilitado como una simple Entidad de Tiro Deportivo», explicaron, recalcando entre otros puntos que «no existe una habilitación de esa magnitud» en el municipio.
«Son unas 2.00 palomas muertas en competencia, sin contar las que se matan en el desempate, además otras 2.00 en competencias paralelas llamadas “Pooles” (lo que totalizarían unas 4400 palomas muertas y/o heridas de muerte)», contaron.
«Esas 4.400 palomas fueron cazadas ilegalmente, sin un permiso que les permita su cacería, fueron transportadas ilegalmente, sin las autorizaciones pertinentes ni las guías emitidas por las autoridades competentes, en vehículos que no están autorizados para hacer transporte de animales vivos», explicaron.
Recordaron que las aves «luego acopiarlas encerrándolas en grandes jaulones con los que cuenta el PCA, hacinamiento, encierro y acopio también resulta ilegal por no existir autorización posible y finalmente venderlas ilegalmente a los tiradores para colocarlas en las trampas de las prohibidas pedanas de tiro al pichón y matarlas en el marco de la mencionada competencia ilegal». Según cálculos propios, el Pigeon recauda por evento $452.000 «motivo por el cual deben sentirse muy satisfechos».
El comunicado a la redacción de Semanario Regional también fue enviado a otras personas, como el Dr. Ariel Orentlijerman, juez de faltas de Escobar quien estuvo involucrado en otras clasuras.
Consultado sobre el tema, el letrado explicó que «nunca tuvimos cometencia en lo de las palomas. Siempre le entré por el tema del restaurante que tenían pero ahora lo dieron de baja».
Esta histórica institución con más de 40 años en Ingeniero Maschwitz, atrae a competidores de todo el país, incluso de países sudamericanos y España. Millones de muertas en cuatro décadas, gran cantidad de dinero recaudada y repartida entre los ganadores, quejas de vecinos y ambientalistas. Un cuento de nunca acabar…