Un tripulante del Graf Spee en Escobar….
La odisea del Graf Spee: se cumplieron 76 años del hundimiento en el Río de la Plata, del “acorazado de bolsillo” alemán “Admiral Graf Spee”. Por Alfredo Melidore (*).
Este buque, verdadero alarde de la ingeniería naval germana, estaba bajo el mando del capitán Hans Langsdorff,, a quien le encomendaron entorpecer el tráfico mercantil de unidades inglesas. Por lo cual entre octubre y noviembre de 1939, varios fueron los mercantes hundidos por el corsario alemán, hasta que tres unidades de la marina inglesa: el crucero pesado Exeter, y los livianos Achilles y Ajax , le salieron al cruce cerca de las costas uruguayas.
La encarnizada batalla naval que se produjo, tuvo lugar el 13 de diciembre a un centenar de millas afuera de la desembocadura del Río de la Plata. En su transcurso el Graf Spee, dejó rápidamente fuera de combate al Exeter, continuando la lucha con las otras dos unidades británicas, que desde distintos ángulos intercambiaron demoledores cañonazos con su adversario, que al anochecer de ese día seriamente averiado, buscó refugio en el puerto de Montevideo.
Uruguay sólo le concedió algunos días de autorización, para permanecer en puerto y para enterrar a los caídos. Por lo cual el capitán Langsdorff, el día 17 de diciembre, después de sopesar la difícil situación y luego de evacuar a la tripulación, sacó al acorazado rumbo a la desembocadura del Río de la Plata y siguiendo directivas de Berlín, procedió a hundirlo para que no cayera en manos enemigas.
Posteriormente Langsdorff y sus hombres cruzaron a Buenos Aires, donde fueron alojados en el Hotel de Inmigrantes. El capitán alemán fiel a una antigua tradición marinera, no quiso sobrevivir a su nave y se descerrajó un tiro en la cabeza.
Un tripulante de Acorazado en Escobar:
Uno de los radiotelegrafistas del Graf Spee, de nombre Rudolf Donath (foto), que junto a otros camaradas, fue internado por el gobierno argentino en el interior del país, luego de su liberación, vivió algunos años en Escobar, a mediados de la década de 1950. Primero lo hizo en la zona de Loma Verde, y luego construyó una vivienda ubicada en la calle Carlos Pellegrini al 180.
Por esos años Donath trabajaba en la construcción en el barrio de La Paternal, aunque también lo hizo en
Escobar. En 1958 viajó a Alemania, donde además de la faz laboral se dedicó con mucho entusiasmo a ejercer como radioaficionado.
Rudolf Donath, quien falleció en Alemania en 1998, viajó en dos ocasiones de visita a la Argentina – para reunirse con sus camaradas de armas y para participar de sendos homenajes al capitán Langsdorff- , la primera vez fue en 1970, y sólo estuvo en Escobar algunas horas.
Regresó a nuestro país, por poco tiempo, en 1979, pero en esa oportunidad no llegó a Escobar, aunque siempre guardó hermosos recuerdos de este poblado (según nos contó oportunamente su hijo, que actualmente vive en Alemania).
* Alfredo Melidore, historiador local
historiandoescobar@hotmail.com