Alberto Fernández impulsó la legalización del aborto, la reforma judicial y no dio pistas sobre la deuda
El mandatario nacional abrió las sesiones en el Congreso. No hubo anuncios económicos, y sí mucho contenido político.
Con un discurso de 79 minutos, el presidente Alberto Fernández inauguró oficialmente el 138° período de sesiones ordinarias del Congreso Nacional.
Como se esperaba, anunció la presentación de proyectos de ley para legalizar la interrupción voluntaria del embarazo; reformar la Justicia federal, con especial énfasis en Comodoro Py, donde se juzgan las causas de corrupción; y la promoción de industria de hidrocarburos.
Además, destacó los avances diplomáticos para renegociar la deuda externa y decretó el «nunca más a un endeudamiento insostenible». Pero no brindó detalles concretos de la estrategia del Gobierno con los acreedores externos: sólo dijo que se avanzará con una oferta en las próximas semanas y agradeció los gestos del papa Francisco y el Fondo Monetario Internacional.
También defendió el esquema de retenciones que el Gobierno impondrá sobre la exportación de soja.
«Quiero que todos sepan tan sólo enlazando palabras de ocasión. Vengo a darle a mi palabra el valor del compromiso (…) Vengo a proponerles iniciar una marcha que nos permita salir de la postración», dijo en los primeros minutos de su alocución.
«Recibimos un país dañado en su tejido social y productivo. No busco revanchas. Necesitamos que todos asumamos la verdad que nos toca», señaló.
El Presidente hizo alusión a palabras que ya había empleado al asumir en diciembre pasado: «Comencemos por los últimos para llegar a todos».
En su agenda de Gobierno, insistió, busca «tranquilizar la economía, recuperar el trabajo y recomponer los ingresos de quienes menos tienen».
Inflación
El Presidente también mencionó el problema de la inflación en nuestro país. «Que los precios dejen de crecer en Argentina es una responsabilidad de todos. El Estado se va a poner al frente de la batalla con todas las herramientas legales», dijo.
«No es posible que con la moneda estabilizada el precio de los alimentos sigan creciendo. Vamos a exigirles total responsabilidad a los formadores de precios», agregó.
«Debemos terminar con la Argentina de los vivos que se enriquecen a costa de los pobres bobos que estamos condenados a pagar lo que consumimos», remarcó.
Deuda externa
Fernández dijo que el Banco Central se encuentra analizando el endeudamiento de los últimos años y la utilización de esos fondos.
«Nunca más a un endeudamiento insostenible. Nunca más a decisiones que se toman con ínfulas tecnocráticas, de la noche a la mañana y de espaldas al pueblo», dijo.
Y agregó: «Nunca más a la puerta giratoria de dólares que ingresan por el endeudamiento y se van dejando tierra arrasada a su paso»
De todos modos, el Presidente destacó los avances diplomáticos destinados a renegociar la reestructuración de la deuda pública.
«Quiero expresar de modo particular mi agradecimiento al Papa Francisco, quien de modo singular y ante los líderes de las finanzas internacionales volvió a pedir la construcción de una economía con alma», dijo.
Además, recordó que el propio Fondo Monetario Internacional ha sostenido que la deuda argentina «es insostenible». «Esta es la hora de definir de qué lado va a estar cada uno de nosotros. Nosotros estamos del lado del pueblo», dijo.
Fernández señaló que se viene trabajando con el FMI de «forma constructiva» y que hay responsabilidad del Gobierno anterior, los bonistas y el propio FMI. «Lo más importante es que al acuerdo que lleguemos con los acreedores sea sostenible. Que le permita a Argentina que le permita ponerse de pie y no volver a caer», dijo.
Antes había señalado para los que piden ajuste fiscal, que «más ajuste lleva a más recesión, a menos oportunidades, a más pobreza, a más desigualdades, a más exclusión».
Retenciones: mensaje al agro
«El campo debe ser un protagonista importante», dijo Fernández.
«Los hemos convocado para que colaboren en la lucha contra el hambre. También deben hacer el esfuerzo aquellos que producen y exportan», dijo, en referencia al conflicto con el campo.
«Hemos hecho una propuesta generosa en materia de derechos a las exportaciones, en las que sólo se incrementa uno de un total de 25 cultivos que hoy están afectados por esos derechos».
«La propuesta que hemos sometido a consideración del sector, que además preserva la situación de los pequeños productores, respeta en un todo las condiciones de la ley de solidaridad social. Ello resulta absolutamente favorable para muchos cultivos», dijo.
Reforma de la Justicia federal
Fernández anunció, como estaba previsto, un nuevo fuero federal penal «que unificará a los fueros penales que tienen ámbito en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires».
Por un lado, transferirá parte de esos fueros a la Capital Federal y, por otro, los delitos de la administración pública «dejarán de estar en manos de pocos jueces para pasar a ser juzgados por más de medio centenar de jueces».
«Venimos a ponerle fin a la designación de jueces amigos, a la manipulación judicial, a la utilización política de la justicia, y al nombramiento de jueces de poderes inconfensables dependientes de poderes inconfensables», dijo.
Legalización del aborto
El Presidente anunció que en 10 días presentará una ley para la interrupción voluntaria del embarazo en su primera etapa y también «un contundente programa de educación sexual y prevención del embarazo no deseado».
«Lo ineficaz que resulta la norma desde un carácter preventivo (…) La existencia de la amenaza penal ha condenado a muchas mujeres, generalmente de escasos recursos, a recurrir a prácticas abortivas en la más absoluta clandestinidad, poniendo en riesgo su salud», dijo
«El aborto sucede. Es un hecho», remarcó.
«Un Estado presente debe proteger a los ciudadanos en general y obviamente a las mujeres en particular. Y en el SXXI toda sociedad necesita respetar la decisión de sus miembros a disponer libremente de sus cuerpos», añadió.