Francisco Rey dio su apoyo a la candidatura de Sujarchuk
“Leandro (Costa) no me parece malo, pero me identifica lo que propone Ariel. Cuando habla de política empresarial y comercial, por ejemplo, me siento identificado Ariel es claro en lo que propone”, destacó el joven empresario.
Pasa un momento personal magnifico que se relaciona con el comercial: La Espiga continúa con su éxito y ahora se suma Rey Oro Panificados, vendiendo productos en toda la Provincia de Buenos Aires. Luego de la reunión de comerciantes y empresarios que encabezó Ariel Sujarchuk, Francisco Rey no duda en confirmar que ve en él la mejor opción.
“Con Ariel (Sujarchuk) tengo una relación de amistad, lo veo muy capaz de gestionar políticas para mejor el distrito. Lo que está planteando Ariel si lo lleva a la realidad va a superar otros distritos. Hoy los comerciantes les tienen miedo a la municipalidad. No todo gira en torno a la municipalidad, tiene que cumplir su trabajo y listo, ya está”, mencionó.
“Leandro (Costa) no me parece malo, pero me identifica lo que propone Ariel. Cuando habla de política empresarial y comercial, por ejemplo, me siento identificado Ariel es claro en lo que propone. Yo en la fábrica no pongo cartel porque tengo miedo, a ver si me llega una intimación de no se cuánta plata. Cosas claras necesitamos para ver cómo tenemos que jugar, qué está bien y qué está mal. La gente quiere gestión”.
Sobre la relación del éxito personal y el gobierno de turno, Rey manifestó: “Es un 80% personal y un 20% de factores externos. La creatividad está a flor de piel, tenés que ser muy creativo para sostener una empresa, para llevarla adelante, tenés que reinventarte e invertir constantemente”.
En diálogo con Semanario Regional, el joven pero exitoso comerciante definió: “Escobar está lleno de posibilidades y no tenemos un estado a la altura de las circunstancias. La municipalidad debe ser amigo nuestro, un socio nuestro. Con una buena gestión, el Estado puede ser de gran ayuda, hoy estoy descreído”
Pese a que su padre fue concejal en los noventa, Francisco niega la posibilidad de estar relacionado con la función pública: “Yo estoy convencido que mi actividad es la empresa, quiero que haya una municipalidad que ayude a un montón de personas, una municipalidad para todos, que uno sienta un acompañamiento de parte de la municipalidad”.
“En el lugar que estoy, sé que la única forma de que funcionen las cosas es trabajando, sino a fin de mes no llego a pagar los sueldos. Los políticos pierden el foco, están más preocupados más en la rosca que en la gestión. Tienen todos los recursos, están todo el día enfocados en la rosca política. La política se los come”, expresó.
“Yo no le vendo un solo centavo al Estado, mi actividad es cien por ciento privada, no quiero venderle al Estado. Le vendí a Maschwitz, después a Escobar, hoy en toda la provincia. Mi sueño es vender productos a toda la República Argentina. Mi negocio está enfocado en eso, en vender un producto rico, bueno, con todas las condiciones para venderse acá y en todos lados”, agregó.
Su sueño
“No se trata de que pongan trabas, no existen los recursos para que las cosas sean más ágiles, pierdo tiempo, plata, no hay políticas claras… ¿Cómo puede ser que para habilitar una camioneta para transportar sustancias alimenticias tenga que ir a Pilar?”, expuso “Pancho”, por otro lado, confiado en su trabajo actual.
“Tenemos por un lado La Espiga, con nuestro locales tradicionales, y Rey Oro Panificados que es lo que vendemos por fuera a los locales, tenemos cuatro franquicias en Pilar abastecidas por restoranes, empresas, a 200 lugares dela Provincia todos los días”, agregó. “Cuando invertís estás proyectando, a cinco años, por ejemplo, pero el trabajo es día a día”.
El proyecto que no fue
Francisco Rey presidió años atrás la UIDE Joven, paralelamente a la Unión Industrial de Escobar. Sin embargo, la propuesta que incluía a comerciantes de la zona e hijos de reconocidos hombres de negocios del Distrito, no prosperó. “Nos operaron para eliminarlos, esa es otra, todo es una guerra, se tiene que terminar esa guerra, cada uno ocupa un lugar en la sociedad, hay que fomentar todas las cosas buenas”.
En su oficina escobarense, recordó: “La UIDE Joven era un lugar espectacular, un espacio de ayuda para compartir ideas, contactos, experiencias. Se pudo haber aprovechado y potenciado, y la municipalidad no nos acompañó, nos ve como una amenaza política”.