En 2014 se aprobó por unanimidad, pero el por entonces intendente Walter Blanco lo vetó.  En caso de aplicarse, el Estado entregaría un dispositivo de alerta para mujeres y hombres agredidos, que formen parte de un registro, previa denuncia.

La concejal María Rosa Pereyra, quien busca presidir la Comisión Especial sobre Violencia de Género, actualmente en manos de Ingrid Espinoza, volverá a presentar un proyecto que entró por mesa de entradas hace tres años y que en 2014 se tratara sobre tablas. Se aprobó con el voto de todos sus colegas, pero desde el Ejecutivo la acción no prosperó.

Se trata de la ordenanza 14.552/13, que detallaba la creación del Registro DAMHA (dispositivo de alerta para mujeres y hombres agredidos). La propuesta incluía aquellas personas que denunciaran ser víctimas de violencia, que sean registradas en un sistema y se les entregaran, con fondos municipales, un dispositivo que comunicara -en caso de ser presionado- con el 911 y Prevención Comunitaria.

Sin embargo, poco más de dos meses después, el ejecutivo local vetó el proyecto, presentado por la edil de Matheu Pereyra. Fuentes cercanas a Walter Blanco, intendente por aquel entonces, mencionaron que lo acompañarían, que se trataría en conjunto entre la legisladora y el propio jefe comunal, justificando que eso formaba parte de un proyecto global en materia seguridad. Sin embargo nunca prosperó.

En tiempos donde nació el “Ni una menos” y los casos de violencia aumentaron (en Maschwitz, por ejemplo, intentaron violar a una anciana recientemente), Pereyra retomará el proyecto sabiendo que tendrá el apoyo de todo el Concejo. Y si de consenso se trata, también busca modificar algunas comisiones del legislativo, como por ejemplo, la Comisión de Violencia de Género. Según mencionó, ya cuenta con el aval de Proyecto Escobar y el Bloque Peronista Néstor Kirchner.