Una mujer internada en el Hospital Erill de Escobar por presunto caso de dengue
La secretaría de Salud de la Municipalidad de Escobar confirmó que, por un presunto caso de dengue no autóctono, una mujer de 45 años se encuentra internada, en estado estable y bajo control, en el Hospital Provincial Enrique Erill de nuestro distrito. La víctima había vuelto días atrás de Paraguay.
Ante los distintos casos de dengue que se reportaron en la provincia de Buenos Aires y frente al riesgo de enfrentar una posible epidemia, la Municipalidad intensificó las medidas de prevención y lanzó una campaña de difusión entre la comunidad para combatir este virus.
Se dio a conocer este viernes que habría un caso positivo de dengue en el Distrito. Se trata de un caso no autóctono.
«La paciente llegó el domingo, con un cuadro febril y bajas defensas. Según su testimonio, se sentía así desde el sábado, cuando volvió de una estadía en Paraguay. Ya realizamos todos los chequeos y en las próximas horas tendremos la confirmación del laboratorio si estamos ante la presencia del dengue. Para no llevar miedo a la población, hay que enfatizar que el caso todavía no está confirmado, que tenemos a la mujer bajo control médico y que, de ser el virus, no se lo contagió en nuestro distrito», explicó el Dr. Carlos Ramos, director del Hospital Erill.
«No hay que tener pánico ante el dengue, sólo hay que tener cuidados descacharrando nuestras casas y veredas y acudir a un médico si uno empieza a sentir síntomas como fiebre alta (sin resfrío), dolor detrás de los ojos, muscular y de las articulaciones, náuseas y vómitos, cansancio, sangrado de nariz y encías, y erupción en la piel», amplió.
Desde semanas atrás, se realizan operativos de detección temprana para focalizar la contención de la larva del insecto que transmite esta enfermedad. Una vez detectado el nido, se introduce una bacteria que impide el desarrollo de la larva. De manera complementaria, pero en menor medida porque se trata de productos tóxicos, se aplican fumigaciones controladas en un radio de 80 metros (en su vuelo, los mosquitos jamás superan esa distancia).
